Las alarmas residenciales conectadas a una Central Receptora de Alarmas (CRA) actúan como una primera línea de defensa, disuadiendo intentos de intrusión antes de que ocurran. Su sola presencia reduce considerablemente la probabilidad de robos en viviendas.
Ante cualquier intento de acceso no autorizado, la alarma se activa y envía una señal directa a la CRA, que puede verificar la situación y avisar a las fuerzas de seguridad en cuestión de segundos. Esto minimiza el tiempo de respuesta y protege a tu familia incluso cuando no estás en casa.
Las alarmas modernas para hogares particulares permiten controlar y monitorizar el sistema desde una app móvil. Recibe notificaciones en tiempo real, activa o desactiva la alarma y revisa el historial de eventos estés donde estés.